sábado, 14 de septiembre de 2013

No hay más ley que la fiebre del oro en las minas del rey Salomón.





Y desafiando el oleaje sin timón ni timonel
por mis sueños va, ligero de equipaje, sobre un cascarón de nuez 
mi corazón... De viaje.
Luciendo los tatuajes de un pasado bucanero 
de un velero
 al abordaje de un...
De un "No te quiero querer".

¿Y cómo huir, cuando no quedan islas para naufragar,
 al país donde los sabios
 se retiran del agravio
 de buscar labios que sacan de quicio?
(   Mentiras que ganan juicios
 tan sumarios
 que envilecen el cristal de los acuarios de...
De los peces de ciudad,
 que perdieron las agallas
 en un banco de morralla
 en una playa sin mar.    )
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Miente el que vuela cuando corre
y sueña el que viaja de noche.
Siente el que todo lo calla,
muere el que todo lo siente.
Renace el que esquiva las balas
del amor.
Se suicida el que vive para el corazón.

Se atrapa el que se encierra
y se libera el que no ve la jaula.
Crece el que se enerva,
el que se harta de las pautas
que dicta Cupido.
Se reinventa el que acaba con el ruido.

Se pone a dieta el que huye de su alma.
Se revienta el que se acuesta sin madrugadas,
el que escupe en la salsa de la vida,
solo porque alguien quiso quitarle su alegría
y volverla amarga.

Llora el que fue destrozado.
Se gira el que mira hacia otro lado.
Espera el que nunca ha esperado
porque no sabe lo que es morir.
Sufre el que ha amado
porque sabe lo que es vivir.

miércoles, 11 de septiembre de 2013

Canto por las noches en vela.
Partiendo las risas del alba
y quemando las cenizas de las penas.

Lloro de emociones llenas
en versos del mañana
para así quemar la vergüenza ajena.

A veces nacen flores en las peores esquinas
y otras veces mueren por doquier.
En otras ocasiones trabajo lo que trabajé
para volar con el mismo negro de mis pesadillas.